domingo, abril 18, 2010

Día 6 dieta braviada último y nos vamos...

Hola amigos, pues lamento tener que traerles malas noticias. Tal vez mi entrada será larga y aburrida, pero tengo ganas de explicar todos los factores.

El 5to. día que fue el viernes todo salió bien. Tal vez recuerden que me cargaba un dolorón de cabeza el jueves, que gracias a Dios no continúo el viernes, pero el dolor del estómago y el malestar en el vientre tipo cólicos si siguieron.

Me desayuné como 3 cucharadas de sandía, por que estaba pasada. El universo se alineó para no tentarme con los tacos matutinos aostumbrados los viernes en la oficina, por que esta vez nadie me preguntó si iba a pedir así que me evitaron la pena.

Luego al medio día, como en casa no había NADA para echarme de lonche saludablemente, pedí una ensalada de pollo a la plancha del lugar de donde TODOS pidieron tortas... gracias Areli, por que me sentí como el bicho raro, por eso solo cogí mi platito de lechuguita y me fui a mi oficina sola a comer.

Esto aunado a que emocional-hormonal mente andaba yo como un yoyo. Entonces por la tarde fue cuando los niveles de emotividad suvieron a lo alto y casi se me salen las làgrimas sin motivo alguno. Raro? Ni que decir, pero bueno a veces uno no puede predecir los cambios del cuerpo.

Por la tarde noche fui a la escuela y saliendo, ya en mi casa, cené un pepino con limón y chile por que no tenía siquiera ánimos para pecar.

El problema vino al día siguiente... al día 6 y último de la dieta.

Me amaneció a las 5.30 gracias a mi despertador que no apagué. Me volvía a dormir. De nuevo a las 8 escuché ruido y era mi madre rumbo a su curso sabatino. A las 9 me levantó un olor raro tipo pastel, pay, dulce, al que no hice caso, solo para regresar a mis sueñor.

ME levanté a las 11.30. No había lo que me tocaba por el día 6 de la dieta así que me hice un agua de sandía, ni ganas de masticar tenía. Gracias por que la sandía estaba pasada y me dio soltó el estómago como no tienen idea. Me bañé me cambié, me puse sexy y me dirigí al centro al consultorio donde trabaja Imelda. Ahi iba a llegar mi novio.

Platicamos, me maquillé y nos fuimos mi noviecín y yo a hacer unos pagos. De ahí nos fuimos a comer Pollo Loco (pollo asado) y me sentí muy bien por que no comí ni una sola tortilla ni un solo totopo, que son la especialidad de la casa. Me comñi 3 piezas de pollo pelonas solo con limón y salcita pero quedé bien satisfecha. De tomar solo jamaica.

De ahi al cine. Y dije: Ahhh todo bien, por que no pretendo provar nacho ni palomita, hoy es el último día de la dieta y no voy a fallar.

Pues mi novio me preguntó 2 veces si quería algo y dije 2 veces que no. Fui al baño mientras el compraba algo y al salir vi que traía un vaso grande con NIEVE. Me relajé y en cuanto nos topamos, me dijo: Andale dale la primer cucharada. Te va a gustar. Me limité a decirle con cara de molestia: No quiero!!! Me lo haces tan difícil.

Entramos, nos sentamos y empezó la película. Furia de Titanes. Y como en 4 ocasiones me preguntó si de verdad no quería probarla hasta que en la última de plano casi grito y le dije: No entiendes que es tan difícil para mi, no me ayudas, no tengo fuerza de voluntad y tu ofreciendome el veneno, no mames.

Y ahi me quebré, le arrebaté el vaso y me comí las últimas 6 o 7 cucharadas de la nieve de vainilla con trozos de chocolate que había comprado.

Día arruinado.

Así que llegué a la casa con la moral hasta los suelos (aquí ayudaron las hormonas) y me comí un pedacito del pay que había hecho mi papá por la mañana. Y de cenar un jocho y más pay.

Ya se imaginarán como me siento hoy domingo a un día de empezar la otra dieta y con miedo de regarla por que mañana es el pesaje oficial y no sé siquiera si estos errores me ayuden a que llegue por lo menos a verse reflejado todo el esfuerzo de la semana.

Hoy domingo me amaneció a las 11 a.m. y comí una piernita de pollo asada que quedó de ayer.

Mi madre amenza con hacer flautas, así que veremos como nos va mañana día de pesaje oficial.

Les mando besos y espero que iniciemos la semana muy animados.

De verdad tendré que rogar por que mi semana empiece animada, por que al menos hoy... no tengo ganas de nada.

2 comentarios:

  1. hay ese novio pues, el mio ya se acostumbró a que no suelo comer chucherias, así que ya ni me pregunta que si me apetece jaja.

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  2. La verdad es que los fines de semana, da igual con quien los compartas siempre son más difíciles..

    No te preocupes y no te enfades con él.. a veces no se dan cuenta de que te pueden dañar con esos ofrecimientos.

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